La publicación económica Empresa XXI ha elaborado un suplemento sobre eficiencia energética en el que han realizado una encuesta a distintos clústers vascos, entre ellos, a Eraikune. Bajo el título “Concienciados… pero sin perder el norte”, la mayoría de los clústers subrayan la apuesta de las empresas socias por la economía circular y, para ello, abogan por una política que debe defenderse de competidores exteriores que no aplican criterios ambientales.
En el caso de Eraikune, su director general Jon Ansoleaga, ha realizado las siguientes consideraciones a Empresa XXI:
1.- Europa avanza en su apuesta por liderar la transición del modelo económico. ¿Considera que la mayoría de las empresas están en condiciones de adaptarse al cambio a la velocidad requerida, o deberían escalonarse más los pasos?
Probablemente necesitemos acompasar los ritmos de adaptación. Actualmente las empresas vinculadas a la industria de la construcción están haciendo esfuerzos notables de transformación de todos los procesos, pero también es cierto que el margen de mejora es amplísimo. Las empresas son conscientes de que es necesario implementar este proceso con rapidez y se han comprometido a ello en todas las áreas teniendo en cuenta el diseño, las materias primas, el procesado, la producción, la posible reutilización, el reprocesamiento y el reciclaje, porque saben que en ese futuro inminente se asienta las bases de la eficiencia y la sostenibilidad
2.- ¿Cree que la industria europea corre riesgos de competitividad si las administraciones no simultanean la exigencia normativa medioambiental a sus empresas con las medidas defensivas frente a una oferta exterior no obligada en igual intensidad en este campo?
Resulta evidente que serán precisas medidas de protección pero, independientemente de ello, las empresas pueden salir notablemente beneficiadas del cuidado del medioambiente, empezando por la inevitable dependencia que se tiene del medio natural para poder llevar a cabo su actividad. Existen previos como la necesidad de utilizar y aprovechar recursos naturales y energéticos, por lo que si esos recursos se agotasen o se encareciesen estaría cuestionada la propia continuidad futura de las compañías. Del mismo modo, la reducción del consumo de recursos naturales, minerales o energéticos se traduce en un ahorro en los costes corporativos y, una mayor eficiencia de los sistemas, redundaría en un aumento de la productividad y competitividad.
3.- ¿Desde su punto de vista, y para las empresas vascas, la actual política de Economía Circular y exigencias en el uso de vertedero pone en riesgo la actividad industrial de las compañías?
No debería ocurrir, pero es cierto que hay que buscar alternativas competitivas. La construcción constituye una actividad singular en la que participan agentes con características muy diferenciadas y cada uno de sus procesos productivos genera múltiples residuos. No obstante, el sector lleva mucho tiempo trabajando en planes de prevención y minimización de residuos, sabedores de que es un horizonte insoslayable y que una gestión que optimice la reutilización, reciclaje y recuperación puede proporcionar importantes beneficios.
Históricamente la industria de la construcción ha propiciado alguna de las principales vías de reutilización de residuos de diversas industrias. Es un sector con una gran capacidad de absorción de grandes cantidades de residuos. La industria cementera, por ejemplo, ha sido pionera en la reutilización de subproductos industriales en la fabricación de cementos hidráulicos, con el consiguiente ahorro energético.
4.- ¿Considera que la Economía Circular y la Valorización de residuos industriales son una fuente real de oportunidades para el desarrollo de la industria vasca y un camino de competitividad futura?
De momento, la valorización de residuos ya supone un claro compromiso por el desarrollo sostenible y la economía circular para la lucha contra el cambio climático y la conservación de la biodiversidad y eso es relevante.
Y tras esa premisa, llega la decidida apuesta por la construcción sostenible, eje fundamental para la promoción de la Economía Circular como base para el desarrollo social y económico de nuestro entorno. Nuestra industria está persuadida de que ese es el camino, el de la incorporación de criterios de sostenibilidad en proyectos de diseño, desarrollando nuevos materiales y recirculando los residuos derivados de la construcción y la demolición.
La industria de la construcción cuenta especialmente con el desafío de la eficiencia energética. Un reto de país que parte desde el diseño y la gestión de los proyectos constructivos, y continúa con la excelencia en la ejecución de proyectos de construcción y rehabilitación. En estos ámbitos de trabajo, disponemos, sin duda, de un conocimiento de referencia y desde él se abre un futuro de oportunidades.
5.- ¿Desde su Cluster qué medidas sugeriría para facilitar la transición económica de su sector en el desafío de la ecología industrial?
Para ello, nuestro compromiso y recomendación pasa, entre otras muchas medidas, por el fomento de la colaboración público-privada para el desarrollo de proyectos de eficiencia energética y amplificar la colaboración interempresarial para impulsar soluciones innovadoras.
Dicha colaboración debe redundar en una profunda transformación de la cadena de valor de la eficiencia energética: desarrollar empresas rehabilitadoras con capacidades técnicas, tecnológicas y financieras reforzadas, vinculando empresas del sector energético y de las TICs con los que integrarse y generar propuestas de valor más integrales, integrando el talento que este nuevo paradigma va a requerir, y creando los profesionales del futuro.
Por otro lado, consideramos sustancial que se impulsen proyectos de I+D+I que mejoren la eficiencia energética por medio de soluciones tecnológicas y no tecnológicas. Del mismo modo que se potencie la innovación en infraestructuras para que incorporen soluciones tecnológicas que garanticen la sostenibilidad. Traccionar proyectos de innovación que impulsen el ecodiseño y fomentar el desarrollo de metodologías y procesos constructivos industrializados. Del mismo modo acelerar en el diseño de una infraestructura verde, al igual que impulsar proyectos de innovación que tengan como paradigma el ecodiseño y el fomento del desarrollo de metodologías y procesos constructivos industrializados.
6.- ¿Su clúster está realizando acciones en el campo de la sostenibilidad y la economía circular?
En 2020, en ERAIKUNE hemos estado trabajando en el alineamiento de la estrategia clúster con los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por Naciones Unidas.
Con la asunción de este plan nos hemos comprometido a que nuestras decisiones y acciones garanticen que nuestras ciudades y territorios sean seguros, inclusivos, resilientes y sostenibles; asumimos que es prioritario garantizar el trabajo decente para todos, propiciar la construcción de una infraestructura responsable y de calidad para apoyar el desarrollo económico y el bienestar humano.
Adicionalmente, durante el año 2020 las empresas socias de ERAIKUNE presentaron 21 proyectos de I+D+I por valor de 13 millones de euros vinculados con eficiencia energética y economía circular.