El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico anunció hace unos meses el Programa de Rehabilitación Energética de los Edificios, más conocido como PREE, que tiene como objetivo reducir el impacto ecológico que causan los edificios más antiguos evitando que sigan derrochando energía. Los edificios españoles son los responsables de un 30 % de la energía total que se consume en el país. La intención del PREE es que cada construcción consiga reducir, al menos, un 10 % su gasto energético.
Para conseguirlo, el PREE plantea repartir 300 millones de euros en ayudas entre las comunidades autónomas de España, y Ceuta y Melilla, para que los edificios construidos antes de 2007 – que no atienden a normas exigentes de eficiencia energética- sean rehabilitados y logren ser más eficientes. Y, ¿cómo se alcanzará el objetivo? Renovando los elementos que más influyen en el consumo energético de un edificio: su envolvente térmica (es decir, todos los cerramientos que envuelven al edificio como son la fachada, los huecos y ventanas, etc.); sus sistemas de iluminación; y sus instalaciones térmicas, que son los sistemas de climatización, ventilación y agua caliente.
Así, el PREE apuesta y subvenciona sistemas como los de la empresa socia de Eraikune Airzone, que además de mejorar la calidad de vida de las personas, hacen que los edificios consuman menos energía. El camino es comprensible. No tenemos que renunciar al confort, sino a las malas formas de conseguirlo.
¿Quiénes pueden beneficiarse?
Las ayudas económicas del PREE se repartirán entre las 17 comunidades autónomas de España y entre las ciudades de Ceuta y Melilla. El dinero que reciba cada comunidad o ciudad autónoma dependerá directamente del tamaño de su parque de edificios, por lo que las ciudades con mayor espacio construido recibirán más dinero para llevar a cabo las rehabilitaciones. Lo único que exige el PREE para poder pedir la subvención es ser propietario de un edificio (o parte de él) que haya sido construido antes del 2007.
El PREE no excluye a edificios del sector público como diputaciones o ayuntamientos; ni a edificios que pertenezcan a varias personas, ni a viviendas plurifamiliares. Su alcance es amplio y cubre tanto el sector público como el privado. Aunque eso sí, los propietarios de estos espacios deben cumplir con los siguientes requisitos:
Requisitos
El proyecto debe incluir una rehabilitación de la envolvente térmica, una renovación de los sistemas de climatización por otros más eficientes, o una mejora de la eficiencia de los sistemas de iluminación. Esto es, sustituir la energía producida por fuentes convencionales que se basan en combustibles fósiles, como puede ser el gas; por energía renovable, como la energía térmica solar, la biomasa, la aerotermia o la geotermia. Además, las ayudas subvencionan los sistemas de control, regulación y emisión de las instalaciones de climatización que, tal y como demuestran las soluciones Airzone, reducen considerablemente las emisiones de CO2, lo que se refleja directamente en el abaratamiento de la factura de la luz.
Pero, además, para recibir la subvención es necesario que:
- Los edificios que se vayan a reformar se hayan construido antes de 2007.
- La obra no requiera aumentar el espacio ya construido.
- El proyecto cuente con licencia de obra.
- Se demuestre que, con los cambios, el edificio ahorrará, al menos, un 10 % más de energía; o que el edificio ascienda una letra en la escala de certificación energética.
- La rehabilitación no suponga un cambio de uso del edificio.