El Lehendakari, Iñigo Urkullu, acompañado de la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, ha participado en el acto de colocación de la primera piedra del centro de datos de Merlin Properties en Euskadi.
La compañía va a construir una red de centros de datos ultra eficientes energéticamente y con consumo neto de agua nulo en Arasur, Lisboa, Madrid y Barcelona a través de su alianza estratégica con Edged Energy. El de Arasur es el centro de datos con mayor capacidad potencial de los cuatro proyectados por la compañía junto al que construirá en Lisboa, con una capacidad máxima de 100 MW.
El Lehendakari ha afirmado que se trata de una inversión de gran futuro, “porque compartimos la ambición y la capacidad para convertir Euskadi en un ‘Hub digital’ para el sur de Europa”. Así, ha destacado que Euskadi cuenta con un activo de primera línea: la ubicación privilegiada gracias a los dos cables submarinos (“Marea” y “Grace Hopper”) que llegan a través de Sopela. “Esto nos garantiza que la latencia de red sea la más baja de Europa”. Además, ha resaltado el ecosistema logístico, industrial, de comunicaciones y servicios avanzados competitivo y en crecimiento de Arasur para la puesta en marcha de este proyecto.
Este nuevo Centro de Datos cuenta con el respaldo de las instituciones públicas, según ha indicado Urkullu, y nace de un modelo de colaboración público-privado “que es la mejor contribución que podemos realizar a la competitividad de nuestro País en un entorno global”. Ante las dificultades e incertidumbres, el Lehendakari ha abogado por seguir colaborando y remando juntos al servicio de la inversión, el crecimiento y el empleo.
“Esta primera piedra simboliza la capacidad de avanzar desde la colaboración en beneficio del bien común que compartimos: generar oportunidades y empleo de calidad para todas las personas y, especialmente, para la juventud”, ha concluido.
Centro de Datos de Arasur
En la fase inicial del proyecto en Arasur el suministro será de 3 MW y está previsto que la construcción del primer edificio finalice en el segundo trimestre de 2023, lo que elevará la capacidad a 22 MW. Cuando todos los edificios estén operativos, el suministro alcanzará los 100 MW de carga crítica en tres salas de datos y un edificio administrativo. Además, contará con diversas conexiones de fibra de clase portadora, incluida la conexión de latencia más baja entre Europa y América del Norte.