El sector de la construcción en Euskadi cerró 2023 con un incremento del 7,7% en su facturación, alcanzando los 10.052 millones de euros. La rehabilitación de viviendas se consolidó como el principal motor del negocio, representando el 24% de los ingresos del sector, mientras que la edificación de vivienda nueva supuso el 20,6%, según datos del Instituto Vasco de Estadística, Eustat.
Estos datos reflejan una tendencia creciente en la apuesta por la reforma y rehabilitación de edificios, impulsada por factores como las ayudas a la eficiencia energética, la necesidad de modernizar el parque inmobiliario y el encarecimiento del suelo para nuevas promociones. En paralelo, la construcción de vivienda nueva mantiene un peso significativo dentro del sector, aunque se enfrenta a desafíos como los costes de materiales y la disponibilidad de suelo.
Valor añadido. El valor añadido bruto del sector, indicador clave de la riqueza generada, creció un cerca de un 10% en el año 2023, alcanzando los 3.481 millones de euros, la cifra más alta en los últimos diez años. Este crecimiento se debe en parte al aumento de la actividad, pero también a la progresiva modernización del sector, con una mayor inversión en tecnología, maquinaria e innovación en los procesos de construcción.
La edificación sigue siendo la actividad dominante en la construcción vasca, con un 65% del volumen de negocio total. En este apartado, la rehabilitación residencial lidera con un 24%, seguida de la edificación no residencial (12,5%). La vivienda nueva representa el 20,6% dentro del sector residencial y el 7,9% en el no residencial.
Por otro lado, la promoción inmobiliaria aportó el 12,1% de la facturación total, mientras que la obra civil, que abarca infraestructuras públicas como carreteras, puentes o redes de transporte, representó el 21,3%. Otras actividades vinculadas al sector sumaron un 1,7% del negocio.
Gipuzkoa crece un 8%
El crecimiento del sector se dio en los tres territorios históricos, aunque con distinta intensidad. Bizkaia fue el territorio con mejor desempeño, con un incremento del 8,1% y una facturación total de 5.162 millones de euros. Gipuzkoa experimentó un crecimiento del 8%, alcanzando los 3.552 millones. Araba, aunque con un aumento más moderado del 5,5%, facturó 1.338 millones.
El estudio también destaca diferencias según el tamaño de las empresas. Las compañías sin asalariados registraron el mayor crecimiento en facturación, con un 8,7%, seguidas de las pequeñas empresas (1 a 19 empleados), con un 8,6%. Las firmas de mayor tamaño (20 o más empleados) también mejoraron sus cifras, aunque en menor medida, con un aumento del 6,4%.
Aumento del empleo
El sector de la construcción dio trabajo en 2023 a 65.068 personas, la cifra más elevada desde 2013 y un 3,3% más que en el año 2022. Gipuzkoa lideró el crecimiento del empleo con un 5,2%, seguida de Bizkaia con un 3,1%. Araba, por su parte, fue la excepción con una leve caída del 0,4%.
Bizkaia concentró el 53,1% del empleo del sector, seguida de Gipuzkoa con el 33,5% y Araba con el 13,4%. En términos de productividad, el número de horas trabajadas en el sector creció un 4,1% en Euskadi, con incrementos del 6,1% en Gipuzkoa, del 3,9% en Bizkaia y del 0,1% en Araba.
Uno de los datos más destacados del estudio es la evolución de la presencia femenina en la construcción. Aunque sigue siendo un sector mayoritariamente masculino, la participación de mujeres ha alcanzado el 12,1% del total de empleados, la cifra más alta desde 2011. Este aumento, aunque aún moderado, refleja un cambio progresivo en la incorporación de mujeres a un ámbito tradicionalmente dominado por hombres.